Con el poeta Ahmad Al Shahawy

Con el poeta Ahmad Al Shahawy

miércoles, 26 de marzo de 2008

EL ARBOL PEQUEÑO

El árbol que fue delgada luz
trepando un tiempo de sombras y terrones
un día pudo visitar la casa del hombre
y en su camino vertical
tuvo puntas de verano y las hojas conversaron.

Ahora poco importa si la noche llega
o si la lluvia se cuela en su memoria.
El recibe a los pájaros
y las plumas huelen a madera
y la madera duerme el historial de cada mano
junto al verde y eterno sueño
de la estación del agua
del viento
y de la tierra.-

sábado, 22 de marzo de 2008

PASOS DEL OPTIMISTA

Cuando pasé llevando al hombro claridades
ya morían de luz algunos pájaros.

Aún me sigue la sonrisa irónica del pesimista
clavándome sus ojos de distancia.

Hoy vuelvo a salir
hambriento de detalles florecidos.
-Notar algún insecto por ejemplo-
y también a lo ancho enfurecerme
por los gajos marchitos del infante.

No trato de saldar mi deuda equivocada
sólo me pongo en el lugar y tiempo que me toca
convatiendo a cada atávico sombrío
muríendome de vida
abrazado a la luz de la esperanza.-

(De "Del Amor a Todas Partes"-1999-)

viernes, 7 de marzo de 2008

El amigo

Para que entre el amigo
abres la definitiva puerta
y ya no cabe delimitar los vientos de la casa.
No cabe lo insolente del oro y el herrumbre
ni título gesticular a lo solemne.

Lo más cercano al pájaro.
El privilegio a la heredad de la mañana y el camino.
El libro en posesión del sueño.
La música.
El árbol.
Todo parece corresponder a su lugar debido
lugar donde la mano se derrocha.
Allí donde todo pasa y quedan las cosas
que nadie dejó pero que al fin ostentas
pasos
voces
risas.
Allí abres la puerta
la definitiva puerta
para que mérito y equívoco
nunca más te encuentren solo.-

(De "Al Sur del Norte del Sur"-2006-)

lunes, 3 de marzo de 2008

ACASO

Oye niño.
¿Acaso no debieras pasarme igual que el viento
desprendido
al desparpajo
con manos vivas y alegrías despeinadas.
¿Acaso no debieras ignorarme
y andar tu mundo soñando suspendido
por la magia de un hilo interminable.
¿Acaso no debieras y sin embargo
me condeno con tus ojos
cuando dices tristemente !Señor...¿me compra?
o más acá o más allá qué importa
cuando un extraño frío apremia al ancho mediodía
y tu lento paso dice que se fue la tarde.

Por eso y por todas las costillas
por dentro y por fuera me repito.
¿Acaso es de niño dormir donde el olvido
o caer de rodillas sobre el sueño de un juguete.
¿Acaso es de niño
este mundo y el que viene
si es el mismo con el cual me trato y me salpico.

Oye niño
prueba con mi sombra
que tus manos hacedoras como ella me persigan
y al tocarme tu sonrisa
me deje un nuevo intento sobre el hombro
de dar vuelta del revés hacia el derecho
este mundo breve que te quito.-